Johnny es un militar varonil, de aspecto recto y alto. Pero aquí está, todo regalado a su compañero de regimiento, el twink Scott. Scott tiene la sartén por el mango porque Johnny es adicto a su gran polla. Con su carne, Scott lo dirige a su antojo, y una vez que está en su culo, él tiene el control. Ese es el secreto entre los dos: en cuanto se quedan solos, Johnny se convierte en el vertedero de semen de su colega, obedeciéndole sexualmente a su antojo. Le gusta tanto ser follado que nunca puede resistirse.

El oficial Dacotah Red trabaja en una zona bastante caliente, pero está a punto de ponerse mucho más caliente cuando responde a una llamada de allanamiento de morada y encuentra al okupa Scott Finn dentro. Dacotah le da a Scott dos opciones: satisfacer las fantasías de Dacotah o llevar el caso ante el juez. Scott decide que la primera es la mejor opción, especialmente cuando Dacotah saca su larga polla. Scott se la traga al instante, atragantándose con esa carne de poli y llevándosela hasta la base. Dacotah sonríe con aprobación mientras Scott trabaja su polla. Luego pone a Scoot sobre la cómoda y le devuelve el favor, follando con la lengua el agujero de Scott antes de ponerlo de pie contra la cómoda y machacarlo por detrás. Su gruesa polla abre a Scott de par en par, y Scott gime con cada embestida. Pero Dacotah no es un pony de un solo truco, y una vez que ha tenido su relleno, le dice a Scott que quiere montarlo, por lo que monta su prisionero potencial y se abre de piernas. Scott lo llena bien, follándoselo por detrás hasta que Dacotah no puede aguantar más. Escupe su semilla por todo el suelo mientras Scott se saca y le revienta con la suya. El oficial Red le dice que es mejor que no lo encuentre en cuclillas aquí mañana (¡guiño, guiño!) ¡Disfrútalo!