Tomas Fuk realizó una de sus caminatas habituales y se encontró con Vito Marciano, que hicieron clic al instante. Vito aceptó llegar al lugar de Tomás y quería tocarlo tanto que se apresuraron a su departamento muy rápido. Comenzaron a besarse de inmediato hasta que Tomas se bajó los pantalones para chuparle la polla. Después de un tiempo, Vito comenzó a succionarlo y amordazó su polla mientras su amante gemía. Después de devolver una mamada, inclinó a Vito y comenzó a infiltrarse en su gilipollas a pelo. ¡Vito luego comenzó a montar su dura polla erecta hasta que se sintió listo para follarlo una vez más antes de correrse en su cara!
